Tan pronto como el verano se convirtió en otoño, la fresca brisa del otoño se está convirtiendo rápidamente en un frío viento invernal. El invierno, por muchas razones, podría ser mi estación favorita y estoy seguro de que no soy el único que se siente así. Aunque haga frío, la Navidad está a la vuelta de la esquina y la nieve que cae y cubre los árboles con un manto blanco parece una escena de una película. Simplemente cierra los ojos e imagina: un frío paseo invernal por las calles nevadas, admirando las centelleantes luces navideñas colocadas maravillosamente en todas partes. Llegar a casa alegre, con las mejillas sonrosadas por el frío; enroscas tus dedos alrededor de una taza de chocolate caliente y te acurrucas en una manta junto al fuego. Todo suena como un sueño, no puedo evitar sonreír sólo de pensarlo.
Sin embargo, aunque el clima frío exige innumerables momentos acogedores, también trae consigo algunas condiciones duras para la piel. Estoy seguro de que todos hemos experimentado algo de sequedad durante los meses de invierno, junto con esas mejillas sonrosadas que no parecen desaparecer cuando regresamos del frío. La verdad del asunto es que el viento frío y el clima aumentan la sequedad y la inflamación, y esto es algo que todos experimentamos y para lo que debemos preparar diligentemente nuestra piel. Afortunadamente, hay muchas maneras de asegurarnos de que nuestra piel se vea y se sienta mejor durante estos días más fríos, y tengo los secretos que estás buscando. ¡Empecemos!
